miércoles, 21 de agosto de 2013

Estado de revista


Querida directora:

Los días 20 de agosto y febrero son señalados en la agenda porque su revista lleva el suplemento Colecciones. Los mejores números del año llegan al quiosco y por fin tenemos una verdadera exposición de las tendencias prêt-à-porter de los creadores en desfiles de París y Milán, un poco de alta costura y unas pinceladas de diseño local. Un disfrute ver a las modelos derechas y enteras, luciendo los conjuntos de ropa y complementos. No interfieren ni front-rows, ni el photoshop, ni posturas extrañas.


El resto del año nos castigan con pocas páginas de moda. El grueso se lo lleva la publicidad de productos de lujo inalcanzable, reportajes periodísticos de calidad discutible y bastante carroña de paparazzi. Excesiva la sección de belleza que pretende hacernos caer en el eterno disgusto con nuestra propia imagen si no consumes todos los cosméticos específicos o el bisturí. Aquí y allá abundan los consejos tiranizadores con mensaje: has de estar perfecta en el trabajo, en casa y en el supermercado.

Apenas han evolucionado las revistas femeninas en 50 años. Sólo han añadido unas páginas de sexualidad, automóviles y compras a bajo precio. La revolución feminista está presente para disimular. Su competencia, las blogueras, tampoco añaden mucho valor al tema. La mayoría se autorretratan utilizando su mismo lenguaje: Lolita for ever.


Ya les he escrito otras veces y me responden que ustedes dan lo que el público les pide. Sigan con los reportajes fotográficos, son excelentes. Pero ahí va, de nuevo, lo que me gustaría leer en su revista:
  • Entrevistas a los diseñadores sobre su proceso creativo, bocetos, las pruebas.
  • Cómo son los nuevos materiales de la industria textil.
  • Utilizar en los reportajes la nomenclatura propia de las formas, tejidos y patrones.
  • El funcionamiento de las empresas de moda.
  • Consejos de expertos de qué es lo que favorece a cada mujer.
Vamos, hacerla un poco más profesional y menos superficial. Echen una ojeada a sus colegas, los periodistas de deportes. Detallan con entendimiento las jugadas, los entrenos y la fisiología del cuerpo de los jugadores. Si los comparamos, parece que los magazines femeninos los hagan unas simples aficionadas. Necesita mejorar.

Atentamente,
L. A.



ps. Llevo 25 años fiel a su revista. El 20 de septiembre vuelvo a comprar un ejemplar; viene con el especial Bolsos y Zapatos, imprescindible antes de ir al Zara, que hacen muy buenas copias.



*Las imágenes pertenecen a una comparativa realizada por el suplemento de El País, SModa.

4 comentarios:

  1. Demanes massa. Això no és alemanya.

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    1. No crec que el Vogue alemany sigui massa diferent, suposo que estan sotmesos a les entrades publicitàries de cosmètics i productes de luxe i del que porten les celebrities. És la manera d'aguantar una revista a color i 300 pàgines. Però m'agrada demanar, ni que ho faci tota sola.

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    2. Pensava en Burda.

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  2. Vaale. No és ben bé una revista de moda, sí de labors amb patrons. Gran revista.

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