He salido del cine con cierta tristeza que tiene algo que ver con la nostalgia. Michel Hazanavicius consigue estimular con The Artist nuestro amor al cine clásico con un encantador y emotivo revival de las películas de la edad de oro de Hollywood. Pero el experimento arqueológico se queda en eso.
Evoca con trampa los encuadres y los grises porque son demasiado perfectos. Revive los gestos de los artistas exagerándolos. Despierta emociones con una narración sin sorpresas. Alude con música sinfónica bandas sonoras que no tienen nada que ver con el cine mudo. Es un pastiche muy sugerente, atractivo, pero a la vez, ecléctico y extraño, porque en realidad aquel cine ni es así, ni puede volver.
Me ha parecido interesante el trabajo de Valentin (Dujardin, me ha recordado mucho a Gene Kelly) en el difícil doble papel de actor actuando y viviendo. Menos, el de la muy fotogénica Peppy (Bejo) y fantásticos los secundarios Goodman, de magnate del cine y Cromwell como Clifton, que no han echado mano de hacerse los antiguos. Muy graciosa la intervención minúscula del odioso Mc Dowell. Y Espero que se acuerden del perrito cuando nominen la película, porque está de Óscar.
Los espacios son impecables, en especial el cine teatro del inicio, las calles de la ciudad, los estudios y las mansiones. Preciosa la escena de la escalera donde se cruzan los protagonistas. El vestuario delicioso luce en unos fotogramas muy pulcros. La imitación ha sido un éxito, aunque a mí me provoca desazón y nostalgia por las verdaderas películas en blanco y negro. En la mayoría de las críticas se repite que esta película es una joya, sí, visualmente, de cristales brillantes y falsa como la corona de Arquímedes.
Ja dic, darrerament se'ns donen molt bé les superfícies, però una mica més de txitxa seria d'agrair.
ResponderEliminarAi allau, que tot s'enfonsa, des dels superficials creuers als vaixells amb molta panxa com el Liceu..
EliminarTu análisis es perfecto y además tiene chicha. Ves a ver La bendición de la tierra, que durará cuatro días
ResponderEliminargrcias, JL, pero creo que esta tarde me voy a perderme con el agente Smiley o los matrimonios carniceros de Polansky.
EliminarEl Cine ja és això falsedat ben embolicada.
ResponderEliminarés cert, Joaquim, però aquí hi ha doble trampa.
EliminarRes és el que era. les vostres opinions, Kalamar, Joaquim, Allau, José Luis, em tenen indecisa i quan estic indecisa sol voler dir que, de moment, no aniré a veure-la.
ResponderEliminarPassaràs una bona estona, i potser no et molesta aquest regust a falsificació com a mi.
EliminarLa podrien haver acolorit després de filmar-la en blanc i negre, per fer-se els irònics, que sempre queda bé.
ResponderEliminarLo Rat, sempre vas molt més enllà! què bo!
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ResponderEliminarA very well article :)
ResponderEliminarhave you watched it, mr resoNick?
EliminarBuena definición: un cristal brillante pero falso. Saludos!
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